lunes, enero 18, 2010

ANGER

Recién piso la ciudad de México y siento odio por todo: las calles asquerosas, mi vecino ebrio de 60 años, mi otro vecino que se cree parido por amlo; también odio a los ambulantes y a los putos ciegos que en el metro venden cds piratas con sus bocinas a todo volumen. Y podría seguir enumerando cosas y gente que odio y mis rasgos sociópatas brotarían fácilmente. Me gustaría estar perdido como para tomar mi machete afilado y mandarlos al “otro mundo”, no se por qué no me he hecho de un revolver, no se por qué cuando estoy cagando incluso planeo como matar a los vecinos, sería cuestión de cazarlos y dos tiros o un navajazo en el abdomen. Mierda, hoy tuve una gran oportunidad, bastaba con vaciarle todas las gotas oftalmológicas en su tequila barato, y sin embargo solo me atreví a orinarlo y agitarlo un poco, en estos momentos debe estar disfrutándolo con esos pobres diablos de sus “amigos”. Se me ocurrió comentarlo con mi padre y claro que no le causo gracia lo de las gotas, vaya, si les iba dar una muerte placentera con su tequila, quién iba a cuestionar su jodido deceso, solo eran tres borrachines. Platicando con Serapicus Terrorificus me decía: el pedo es dejar que la gente se desmadre solita y sin meter las manos… y tiene razón, esa clase de personas al final terminan ahogándose con su mierda. De hecho aunque cada vez que vociferan intentan “insultarme” le tomo poca importancia, unas mentadas de madre y demás son realmente poco como para enojarme, más aún de “tipos fantasmagóricos” que aunque griten que casi casi van a matarme, solo lo hagan de “dientes para adentro”… esos, para mi no existen. Quien te quiere matar lo hace y no vocifera, así que cada vez que se molesta el vecino parido por amlo, enloquezco un poco y en el iTunes suena a todo volumen death metal. No se por qué después de ver su rostro y su machismo arrinconado detrás de su departamento, me entra el odio y de cierta forma me violento con Samael o Marduk; yo si no tuviese nada que perder, le cortaría la yugular mientras los gatos jugarían con la sangre a chorros. Ese puto del vecino no es capaz de asomarse por su puerta y decirme las cosas de frente, siempre manda a su esposa hipocondríaca… en fin, dejaré que se “desmadren solos”, y no solo ellos, también toda esa gente que se siente superior y de frente se “achican”… mierda, odio este México tan jodido.

1 comentario:

Soy Otro Tu dijo...

ah! amarga madurez flowing trough our vains..esa nos vuelve tan suaves

Salud

http://www.youtube.com/watch?v=sru0XUwsBPM